15-05-2020, 01:53
Francia se propone repatriar toda la producción de PSA y de Renault
El Gobierno francés ha lanzado un aviso a las automovilísticas: si quieren recibir ayudas públicas necesitarán repartriar la producción de sus vehículos. Así lo aseguró el ministro de Economía y Finanzas, Bruno Le Maire, en una entrevista con la cadena de radio BFM Business.
"La industria automovilística francesa se ha deslocalizado demasiado y debe echarse atrás". La repatriación de la producción, según Le Marie, debe ser "la contrapartida" a las ayudas que el Estado francés conceda a las automovilísticas galas para superar la presente coyuntura.
Y es que el Estado francés es juez y parte de la situación por la que atraviesa la industria de la automoción. Además, Francia posee el 15% del accionariado del Grupo Renault. Dicho consorcio ha solicitado ya la inyección de liquidez para paliar los efectos de la pandemia del coronavirus. Concretamente, una inyección de 5.000 millones de euros, como un préstamo garantizado por parte del Estado francés.
"Está en juego nuestra industria del automóvil", aseguró Le Maire en abril, al tiempo que apuntó que hay un millón de empleos ligados a ese grupo en todo el territorio.
Y es que la marca del rombo anunció en la presentación de resultados de la compañía, el pasado 23 de abril, que está reduciendo su estructura de costes para contener la pérdida de más de 5.000 millones de euros de efectivo que registró durante el primer trimestre de 2020, cuando su facturación cayó un 19,2% con respecto al mismo periodo del año anterior.
Así, Francia posee el 6% del accionariado de la fusión de los conglomerados automovilísticos PSA y FCA, cuya viabilidad analizará la Unión Europea antes del 17 de junio. Previo a la firma de fusión, el Estado galo poseía un 12% del accionariado de PSA. Además, con la fusión de PSA y FCA, el grupo chino Dongfeng, que también poseía el 6% del accionariado, venderá 30,7 millones de acciones, que comprará PSA y serán canceladas, con el resultado de una titularidad del 4,5% del nuevo grupo. Pero la mayoría del accionariado lo tiene la familia Agnelli, a través de Exor, pues cuenta con un 14% del capital de la fusión entre ambos consorcios.
Esta demanda por parte del Gobierno francés ni es nueva ni tiene que ver con la crisis del coronavirus. En los últimos 15 años, los distintos ministros galos han estado estrangulando, y de qué forma, este sector, el cual, debido a los costes de producción de otros países, se ha terminado deslocalizando por todo el mundo.
Y es que la producción de vehículos se divide en tres sectores en función de su competitividad: premium, medium y low cost. En el primer escalón se encontraría la producción de las factorías alemanas y francesas; en el segundo, la española y la portuguesa; y en el último, la eslovaca y la marroquí. Así, modelos como el Peugeot 208 se fabrican en Eslovaquia y Marruecos, mientras que el Peugeot 2008 se ensambla en la factoría que PSA tiene en Vigo.
Pero ahora el Estado francés está preocupado. Para 2030 quiere tener una producción de vehículos eléctricos del 20%-25%, según declaraciones de Hervé Guyot al periódico francés Les Echos.
Posición de España
Las declaraciones de Le Maire sobre la condición de revertir las deslocalizaciones de la producción de vehículos, a cambio de recibir ayudas gubernamentales, también repercuten en las fábricas españolas. La posibilidad de mover modelos de una fábrica a otra no es nada factible, pues el principal problema de Francia radica en la alta competitividad en los costes frente a otros países. Pero sí que puede jugar un papel importante en la fabricación de modelos eléctricos.
De esta manera, Renault ya produce el ZOE, cien por cien eléctrico, en la planta gala de Flins, y en 2018 planeó invertir 1.000 millones de euros en Francia, con el objetivo de hacer de su factoría de Douai el centro de sus futuros modelos eléctricos. Por su parte, el consorcio PSA actualmente no dispone en Francia de una plataforma dedicada a la producción de vehículos eléctricos, por lo que sus modelos Peugeot 208 eléctrico y Opel Corsa eléctrico se ensamblan en Eslovaquia y España, respectivamente.
Nuestro país cuenta con 17 fábricas de automoción, de las que siete de ellas pertenecen a los dos grandes consorcios automovilísticos franceses: PSA, que engloba a las marcas Peugeot, Citroën, DS y Opel; y Renault, con la marca homónima, Dacia y Alpine. Así, mientras PSA tiene tres plantas en España (Vigo, Figueruelas y Madrid), la marca del rombo tiene hasta cuatro factorías ubicadas en nuestro país (dos en Valladolid, una en Palencia y otra en Sevilla).
Producción en Francia
La producción automovilística en Francia cambió con la crisis económica de 2008. Entre 1997 y 2006, la producción de vehículos en Francia por parte de los constructores galos se incrementó un 10,5%, hasta las 2.791.000 unidades, según datos de la patronal francesa CCFA. Un año después, en 2007, la fabricación cayó un 7,8% en tasa interanual, hasta los 2.573.000 vehículos, pero seguía suponiendo un aumento del 1,9% en comparación con 1997.
En 2008, con el estallido de la crisis financiera, los constructores franceses redujeron su producción de vehículos en suelo galo un 17,3% en tasa interanual, lo que supuso un descenso del 15,7% frente a los datos de 1997. No fue hasta 2010 cuando la producción de vehículos en Francia por parte de los constructores galos se incrementó un 14,6%, aunque si se comparan estos datos con los de 1997, la caída es del 23,2%, hasta las 1.939.000 unidades. Dos años después, en 2012, la producción volvió a caer un 17,9% en tasa interanual, lo que agravó el descenso con la producción lograda en 1997, hasta caer un 34,7%.
Pese a que en 2018 los constructores franceses lograron incrementar la producción de vehículos en territorio galo un 1,5% en tasa interanual, hasta 1.937.000 unidades, la fabricación acumuló un descenso del 23,2% en comparación con los datos de 1997.
Producción en España
En términos de producción hay que tener en cuenta que las tres plantas que PSA tiene en España produjeron en 2019 un total de 930.084 vehículos, lo que supone el 32,9% de la fabricación total nacional.
Por su parte, las fábricas que Renault tiene en Valladolid y Palencia produjeron el año pasado 477.000 unidades, el 16,9% del total.
Por lo tanto, en el caso de que los siete centros productivos de los dos grupos automovilísticos ubicados en España se llevasen la producción a otro país, supondría reducirla a la mitad. Concretamente, la producción de vehículos caería un 49,8%, lo que ubicaría a España en niveles productivos por debajo de los registrados en 2019 por la República Checa, y le colocaría como el decimosexto productor mundial (actualmente, España ocupa la octava posición mundial de constructores y la segunda europea, por detrás de Alemania).
En lo que a exportación se refiere, Francia es el segundo país de destino de la producción de vehículos fabricados en España. Así, en 2019 un total de 437.550 vehículos se exportaron a Francia, lo que supone una cuota de mercado del 18,9%.
Otro dato importante es la pérdida de puestos de trabajo. El Grupo PSA emplea en Vigo, Figueruelas y Madrid a más de 13.700 personas, mientras que Renault da trabajo en sus cuatro factorías a más de 10.000 trabajadores.
En España, las 17 fábricas de producción emplean a más de 63.000 trabajadores. En el caso de que PSA y Renault echasen el cierre a sus factorías, más de 23.700 personas se verían afectadas. Esto supondría perder el 37,6% del empleo directo en la producción de vehículos.
Seis de los 20 modelos más vendidos en Francia son "españoles"
De los 20 modelos más vendidos en Francia a lo largo del pasado año 2019, seis se fabrican en España. El primero fue el Renault Captur, fabricado en exclusiva mundial en la factoría de Renault en Valladolid, que fue el sexto más demandado por los consumidores franceses, con 64.050 entregas en 2019. Le siguió el Peugeot 2008, séptimo modelo más vendido en Francia, que se ensambla en la factoría de PSA en Vigo, con 59.218 ventas. El duodécimo fue el Citroën C3 Aircross, producido en la factoría zaragozana de Figueruelas, con 46.946 ventas. Le siguió el Renault Mégane (Palencia, 44.212 ventas). El 15º modelo fue el Volkswagen Golf, que se ensambla en Pamplona (38.941 unidades). Por último, el decimonoveno modelo más vendido en Francia fue el Opel Corsa (producido también en Figueruelas), con 27.698 unidades vendidas el pasado año 2019.
En España se compraron más de 460.000 coches franceses en 2019
En España, las cuatro marcas del Grupo PSA (Peugeot, Citroën, Opel y DS) alcanzaron una cuota en el mercado nacional de casi el 22%, con unas ventas de cerca de 320.000 vehículos. Citroën matriculó 103.389 vehículos (turismos y comerciales) en 2019, con una cuota de mercado del 7,01%, en comparación con el 6,77% de 2018. Peugeot matriculó 131.108 turismos y comerciales, lo que le permitió alcanzar una penetración del 8,9% en el mercado nacional, tres décimas más que en 2018.
En cuanto a Renault, la marca del rombo vendió en España 86.419 unidades en 2019, un 10,2% menos en tasa interanual, según datos de la patronal Anfac. Por su parte, Dacia entregó un total de 55.689 vehículos, un 7,2% más en comparación con el ejercicio precedente, mientras que las ventas de Alpine ascendieron a 39 unidades, un 44,4% más en tasa interanual.
De los Mozos ya alertó de unos nacionalismos más "exuberantes"
El planteamiento del ministro de Economía y Finanzas del Gobierno francés, Bruno Le Maire, ya lo avanzó el presidente de Anfac y de Renault en España, José Vicente de los Mozos, al asegurar que la situación actual "va a provocar que los nacionalismos en cada país vayan a ser cada vez más exuberantes y cada uno tendrá que mantener la actividad". Y es que los dos grupos automovilísticos franceses (PSA y Renault) tienen un gran peso en el ecosistema productivo español. Así, el Grupo PSA tiene en España tres factorías en las que emplea a más de 13.700 trabajadores en la fabricación de vehículos, mientras que las cuatro centros productivos de Renault dan trabajo en España a más de 10.000 empleados. Por ello, el peso de estos dos consorcios en la producción de vehículos en España supone el 49,8% del total de vehículos producidos en 2019.
PSA y Renault acapararon el 58,4% del mercado francés en 2019
PSA y Renault vendieron 1.574.091 coches en Francia en 2019, según datos de la patronal francesa CCFA. PSA entregó 875.409 vehículos, un incremento del 2,2% respecto a 2018. Las ventas de Peugeot bajaron un 0,7%, con 464.941 unidades. Las de Citroën se incrementaron un 7,9%, hasta los 309.101 vehículos, mientras que DS creció un 11,5%, con 27.024 unidades . Las ventas de Opel cayeron un 4,5%, hasta las 74.343 unidades.
En el caso de Renault, sus ventas en Francia durante 2019 crecieron un 1,3%, hasta los 698.682 vehículos. Por marcas, las entregas de la marca del rombo se incrementaron un 1,4% con 554.962 unidades comercializadas. Las ventas de Dacia cayeron un 0,7%, hasta las 140.548 unidades. En cuanto a Alpine, se vendieron 3.172 unidades, un crecimiento del 174,3%.
https://www.eleconomista.es/ecomotor/mot...nault.html
El Gobierno francés ha lanzado un aviso a las automovilísticas: si quieren recibir ayudas públicas necesitarán repartriar la producción de sus vehículos. Así lo aseguró el ministro de Economía y Finanzas, Bruno Le Maire, en una entrevista con la cadena de radio BFM Business.
"La industria automovilística francesa se ha deslocalizado demasiado y debe echarse atrás". La repatriación de la producción, según Le Marie, debe ser "la contrapartida" a las ayudas que el Estado francés conceda a las automovilísticas galas para superar la presente coyuntura.
Y es que el Estado francés es juez y parte de la situación por la que atraviesa la industria de la automoción. Además, Francia posee el 15% del accionariado del Grupo Renault. Dicho consorcio ha solicitado ya la inyección de liquidez para paliar los efectos de la pandemia del coronavirus. Concretamente, una inyección de 5.000 millones de euros, como un préstamo garantizado por parte del Estado francés.
"Está en juego nuestra industria del automóvil", aseguró Le Maire en abril, al tiempo que apuntó que hay un millón de empleos ligados a ese grupo en todo el territorio.
Y es que la marca del rombo anunció en la presentación de resultados de la compañía, el pasado 23 de abril, que está reduciendo su estructura de costes para contener la pérdida de más de 5.000 millones de euros de efectivo que registró durante el primer trimestre de 2020, cuando su facturación cayó un 19,2% con respecto al mismo periodo del año anterior.
Así, Francia posee el 6% del accionariado de la fusión de los conglomerados automovilísticos PSA y FCA, cuya viabilidad analizará la Unión Europea antes del 17 de junio. Previo a la firma de fusión, el Estado galo poseía un 12% del accionariado de PSA. Además, con la fusión de PSA y FCA, el grupo chino Dongfeng, que también poseía el 6% del accionariado, venderá 30,7 millones de acciones, que comprará PSA y serán canceladas, con el resultado de una titularidad del 4,5% del nuevo grupo. Pero la mayoría del accionariado lo tiene la familia Agnelli, a través de Exor, pues cuenta con un 14% del capital de la fusión entre ambos consorcios.
Esta demanda por parte del Gobierno francés ni es nueva ni tiene que ver con la crisis del coronavirus. En los últimos 15 años, los distintos ministros galos han estado estrangulando, y de qué forma, este sector, el cual, debido a los costes de producción de otros países, se ha terminado deslocalizando por todo el mundo.
Y es que la producción de vehículos se divide en tres sectores en función de su competitividad: premium, medium y low cost. En el primer escalón se encontraría la producción de las factorías alemanas y francesas; en el segundo, la española y la portuguesa; y en el último, la eslovaca y la marroquí. Así, modelos como el Peugeot 208 se fabrican en Eslovaquia y Marruecos, mientras que el Peugeot 2008 se ensambla en la factoría que PSA tiene en Vigo.
Pero ahora el Estado francés está preocupado. Para 2030 quiere tener una producción de vehículos eléctricos del 20%-25%, según declaraciones de Hervé Guyot al periódico francés Les Echos.
Posición de España
Las declaraciones de Le Maire sobre la condición de revertir las deslocalizaciones de la producción de vehículos, a cambio de recibir ayudas gubernamentales, también repercuten en las fábricas españolas. La posibilidad de mover modelos de una fábrica a otra no es nada factible, pues el principal problema de Francia radica en la alta competitividad en los costes frente a otros países. Pero sí que puede jugar un papel importante en la fabricación de modelos eléctricos.
De esta manera, Renault ya produce el ZOE, cien por cien eléctrico, en la planta gala de Flins, y en 2018 planeó invertir 1.000 millones de euros en Francia, con el objetivo de hacer de su factoría de Douai el centro de sus futuros modelos eléctricos. Por su parte, el consorcio PSA actualmente no dispone en Francia de una plataforma dedicada a la producción de vehículos eléctricos, por lo que sus modelos Peugeot 208 eléctrico y Opel Corsa eléctrico se ensamblan en Eslovaquia y España, respectivamente.
Nuestro país cuenta con 17 fábricas de automoción, de las que siete de ellas pertenecen a los dos grandes consorcios automovilísticos franceses: PSA, que engloba a las marcas Peugeot, Citroën, DS y Opel; y Renault, con la marca homónima, Dacia y Alpine. Así, mientras PSA tiene tres plantas en España (Vigo, Figueruelas y Madrid), la marca del rombo tiene hasta cuatro factorías ubicadas en nuestro país (dos en Valladolid, una en Palencia y otra en Sevilla).
Producción en Francia
La producción automovilística en Francia cambió con la crisis económica de 2008. Entre 1997 y 2006, la producción de vehículos en Francia por parte de los constructores galos se incrementó un 10,5%, hasta las 2.791.000 unidades, según datos de la patronal francesa CCFA. Un año después, en 2007, la fabricación cayó un 7,8% en tasa interanual, hasta los 2.573.000 vehículos, pero seguía suponiendo un aumento del 1,9% en comparación con 1997.
En 2008, con el estallido de la crisis financiera, los constructores franceses redujeron su producción de vehículos en suelo galo un 17,3% en tasa interanual, lo que supuso un descenso del 15,7% frente a los datos de 1997. No fue hasta 2010 cuando la producción de vehículos en Francia por parte de los constructores galos se incrementó un 14,6%, aunque si se comparan estos datos con los de 1997, la caída es del 23,2%, hasta las 1.939.000 unidades. Dos años después, en 2012, la producción volvió a caer un 17,9% en tasa interanual, lo que agravó el descenso con la producción lograda en 1997, hasta caer un 34,7%.
Pese a que en 2018 los constructores franceses lograron incrementar la producción de vehículos en territorio galo un 1,5% en tasa interanual, hasta 1.937.000 unidades, la fabricación acumuló un descenso del 23,2% en comparación con los datos de 1997.
Producción en España
En términos de producción hay que tener en cuenta que las tres plantas que PSA tiene en España produjeron en 2019 un total de 930.084 vehículos, lo que supone el 32,9% de la fabricación total nacional.
Por su parte, las fábricas que Renault tiene en Valladolid y Palencia produjeron el año pasado 477.000 unidades, el 16,9% del total.
Por lo tanto, en el caso de que los siete centros productivos de los dos grupos automovilísticos ubicados en España se llevasen la producción a otro país, supondría reducirla a la mitad. Concretamente, la producción de vehículos caería un 49,8%, lo que ubicaría a España en niveles productivos por debajo de los registrados en 2019 por la República Checa, y le colocaría como el decimosexto productor mundial (actualmente, España ocupa la octava posición mundial de constructores y la segunda europea, por detrás de Alemania).
En lo que a exportación se refiere, Francia es el segundo país de destino de la producción de vehículos fabricados en España. Así, en 2019 un total de 437.550 vehículos se exportaron a Francia, lo que supone una cuota de mercado del 18,9%.
Otro dato importante es la pérdida de puestos de trabajo. El Grupo PSA emplea en Vigo, Figueruelas y Madrid a más de 13.700 personas, mientras que Renault da trabajo en sus cuatro factorías a más de 10.000 trabajadores.
En España, las 17 fábricas de producción emplean a más de 63.000 trabajadores. En el caso de que PSA y Renault echasen el cierre a sus factorías, más de 23.700 personas se verían afectadas. Esto supondría perder el 37,6% del empleo directo en la producción de vehículos.
Seis de los 20 modelos más vendidos en Francia son "españoles"
De los 20 modelos más vendidos en Francia a lo largo del pasado año 2019, seis se fabrican en España. El primero fue el Renault Captur, fabricado en exclusiva mundial en la factoría de Renault en Valladolid, que fue el sexto más demandado por los consumidores franceses, con 64.050 entregas en 2019. Le siguió el Peugeot 2008, séptimo modelo más vendido en Francia, que se ensambla en la factoría de PSA en Vigo, con 59.218 ventas. El duodécimo fue el Citroën C3 Aircross, producido en la factoría zaragozana de Figueruelas, con 46.946 ventas. Le siguió el Renault Mégane (Palencia, 44.212 ventas). El 15º modelo fue el Volkswagen Golf, que se ensambla en Pamplona (38.941 unidades). Por último, el decimonoveno modelo más vendido en Francia fue el Opel Corsa (producido también en Figueruelas), con 27.698 unidades vendidas el pasado año 2019.
En España se compraron más de 460.000 coches franceses en 2019
En España, las cuatro marcas del Grupo PSA (Peugeot, Citroën, Opel y DS) alcanzaron una cuota en el mercado nacional de casi el 22%, con unas ventas de cerca de 320.000 vehículos. Citroën matriculó 103.389 vehículos (turismos y comerciales) en 2019, con una cuota de mercado del 7,01%, en comparación con el 6,77% de 2018. Peugeot matriculó 131.108 turismos y comerciales, lo que le permitió alcanzar una penetración del 8,9% en el mercado nacional, tres décimas más que en 2018.
En cuanto a Renault, la marca del rombo vendió en España 86.419 unidades en 2019, un 10,2% menos en tasa interanual, según datos de la patronal Anfac. Por su parte, Dacia entregó un total de 55.689 vehículos, un 7,2% más en comparación con el ejercicio precedente, mientras que las ventas de Alpine ascendieron a 39 unidades, un 44,4% más en tasa interanual.
De los Mozos ya alertó de unos nacionalismos más "exuberantes"
El planteamiento del ministro de Economía y Finanzas del Gobierno francés, Bruno Le Maire, ya lo avanzó el presidente de Anfac y de Renault en España, José Vicente de los Mozos, al asegurar que la situación actual "va a provocar que los nacionalismos en cada país vayan a ser cada vez más exuberantes y cada uno tendrá que mantener la actividad". Y es que los dos grupos automovilísticos franceses (PSA y Renault) tienen un gran peso en el ecosistema productivo español. Así, el Grupo PSA tiene en España tres factorías en las que emplea a más de 13.700 trabajadores en la fabricación de vehículos, mientras que las cuatro centros productivos de Renault dan trabajo en España a más de 10.000 empleados. Por ello, el peso de estos dos consorcios en la producción de vehículos en España supone el 49,8% del total de vehículos producidos en 2019.
PSA y Renault acapararon el 58,4% del mercado francés en 2019
PSA y Renault vendieron 1.574.091 coches en Francia en 2019, según datos de la patronal francesa CCFA. PSA entregó 875.409 vehículos, un incremento del 2,2% respecto a 2018. Las ventas de Peugeot bajaron un 0,7%, con 464.941 unidades. Las de Citroën se incrementaron un 7,9%, hasta los 309.101 vehículos, mientras que DS creció un 11,5%, con 27.024 unidades . Las ventas de Opel cayeron un 4,5%, hasta las 74.343 unidades.
En el caso de Renault, sus ventas en Francia durante 2019 crecieron un 1,3%, hasta los 698.682 vehículos. Por marcas, las entregas de la marca del rombo se incrementaron un 1,4% con 554.962 unidades comercializadas. Las ventas de Dacia cayeron un 0,7%, hasta las 140.548 unidades. En cuanto a Alpine, se vendieron 3.172 unidades, un crecimiento del 174,3%.
https://www.eleconomista.es/ecomotor/mot...nault.html