[RA.]

Mi querido amigo Isma, cuida bien a esa chica. Cuando me la presentaste en agosto me pareció una chavala estupenda, y creo que con las que has pasado te mereces una buena mujer .

¿Te comenté alguna vez que mi mujer es diez años mayor que yo?

Nos conocimos el 15 de septiembre de 1997, fíjate si me acuerdo. Yo tenía 20 años y venía de varios puteos en relaciones anteriores. Ella tenía 30 y venía de un matrimonio roto con un maltratador. Ninguno de los dos teníamos interés en iniciar cualquier tipo de relación sentimental, íbamos a lo nuestro. Un mes antes me había apuntado en una academia de oposiciones, Cefiasa, y fue allí donde coincidimos.

Yo era el churumbel de la clase, allí todos tenían de 30 años para arriba. Ella entró, vió lo que había y pensó "me voy a sentar con este chico jovencito que no quiero que me molesten". Empezamos a quedar por temas de los estudios. Congeniamos muy bien. Empezamos a quedar para tomar cafés y eso, me sentía muy atraído por ella, aunque no era lo que deseaba. El 6 de enero le estampé un morreo en plena calle. Y ella me correspondió. Lo hice sin pensarlo, simplemente ocurrió.

Y hasta hoy.

Moraleja: nunca sabes dónde puedes encontrar el amor.

Tampoco voy a decir que ha sido un camino de rosas. La diferencia de edad tiene sus cosas. Por ejemplo, sus padres eran mayores y había que estar cuidando de ellos continuamente, deberíamos haber estado haciendo cosas de pareja pero no podía ser.

Sus amistades me tomaron casi todas a risa. En plan "este niñato es un rollo de la chavala, ¿para qué nos lo presenta? mañana estarán cada uno por su lado, así que paso de tomármelo en serio"... y luego se tuvieron que tragar sus palabras. Curiosamente cuando murió mi suegro hace un par de meses una de esas parejas se enteró y vino a darle el pésame a mi mujer al tanatorio. A ella le oí decirle a mi mujer "qué bien escogiste, buscaste a alguien que miraba por ti". Por lo visto nosotros no sabíamos de ellos pero ellos sí sabían de nosotros.

Y es que ese comentario vino porque con la pareja hay que estar a las duras y a las maduras. Es fácil estar cuando hay fiesta, y difícil cuando hay una enfermedad o un problema serio. Eso de tener aficiones comunes con la pareja y esas cosas es nada. Lo importante es quererse, respetarse y apoyarse. Con mi mujer apenas tengo aficiones comunes pero hablo con ella de todo. Y la hago reír. Y ella a mi. Mis padres se sorpendieron en navidades cuando mi mujer suelta en la cena "yo me río mucho con Claudio, es que tu hijo es la hostia". Con la mayoría de la gente soy muy cortado y poco chistoso, con ella me sale natural.

Ah, y en una pareja lo que hay que hacer es follar. Follar mucho, muchísimo. Está comprobado que cuanto más follas con esa persona, más te unes sentimentalmente a ella. No un mete-saca e ya, sino hacerlo bien, demostrando interés y pensando en hacer gozar más a la otra parte que a uno mismo. Y contarle las cosas que te gustan y las que no, y que la otra parte te las cuente, en confianza. Con esto ya tienes la mitad de la guerra ganada.

No sé qué pasará en el futuro. Pero lo vivido hasta ahora ya no me lo quita nadie. Si se rompe la pareja probablemente no volveré a tener otra, ella ha dejado el listón muy alto.

Dios, me aburro a mi mismo de leerme, qué tocho. Lo dejo.

Saludos para todos.

Me alegro que encontraras una buena mujer, yo no tuve suerte 12 años con una persona que te das cuenta que todo fue mentira, la diferencia de edad mi padre se llevaba 17 años con mi madre y tan bien