01-10-2018, 14:23
El mes ha sido raro, como no podía dejar de ser de otra forma tras el antinatural mes de agosto.
Así, las matriculaciones han caído casi un 16% frente al año anterior, quedándose en 70.360 unidades, lo que supone un acumulado en el año de 1.048.620, un 11,8% más que el año pasado.
En cuanto a las ventas, pues hay marcas que han sacado buenos resultados, lo que parece indicar que no han necesitado exprimir mucho los stocks y estaban más preparados para el WLTP seguramente. Y de entre todas ellas, la principal ganadora ha sido Seat, que curiosamente pertenece a un grupo que ha sufrido mucho. La marca española, logra un aumento del 15,3%. Entre las marcas importantes, también ha salido bien parada Peugeot, con un incremento del 10,6%. Kia con un 7,8% queda delante de Citroen con un 6% que mejora por poco a Toyota con un 5,75%. Fuera de las marcas más importantes, cabe resaltar a Volvo con casi un 30% de subida, Mini con un aumento algo por encima del 25%, Jaguar por encima del 37% y DS que parece que nota el efecto del DS7, sube un poco más del 2%, al igual que Lexus.
Y a partir de ahí, el desastre. De más a menos ostión entre los fabricantes más representativos, comenzaremos por los batacazos con sabor italiano de Alfa Romeo que cae un 67% y Fiat que lo hace en un 62%. Audi se queda cerca del 60% también y luego siguen con cifras más modestas pero no por ellos menos contraídas, Land Rover con un 57%, Suzuki un 55%, las marcas de la Alianza Nissan y Renault con un 50,7 y 51,4% que acusan las automatriculaciones de agosto como ninguna otra grande, Honda y VW un 29%, seguida de su filial Skoda con un 26,6% de bajada, apenas peor que Smart. Mercedes por su parte cae poco más del 15%, Opel que sigue sin levantar cabeza un 12%, Mazda un 11,5%. Con caídas más suaves tenemos a Ford, con un 6,4%, Hyundai con un 5,8%, Dacia y Mitsubishi con poco más de un 3%, BMW con un 1,7% y casi sin moverse Jeep apenas cae medio punto.
Respecto a los canales, los particulares han supuesto algo más de la mitad de las ventas, seguidos de empresas y por último alquiladoras, que caen un 50% con el final del verano, aunque los otros también caen por encima del 10%.
Los coches de gasolina han ocupado el 61% de las ventas, llegando los eléctricos al 1.2%.
En cuanto a sectores, el único que ha aguantado bien el tipo ha sido el de los SUV pequeños, con un aumento del 31,6%, pero curiosamente las berlinas también hay tenido saldo positivo, con un aumento modesto eso sí, del 3,6%. Por contra los monovolumen grandes copan el primer puesto en números negativos con una caída del 56,5%, seguido del segmento D con un 47%.
Mes atípico, que sigue a otro mes raro y supongo que el mes que viene aún no veamos normalidad.
Así, las matriculaciones han caído casi un 16% frente al año anterior, quedándose en 70.360 unidades, lo que supone un acumulado en el año de 1.048.620, un 11,8% más que el año pasado.
En cuanto a las ventas, pues hay marcas que han sacado buenos resultados, lo que parece indicar que no han necesitado exprimir mucho los stocks y estaban más preparados para el WLTP seguramente. Y de entre todas ellas, la principal ganadora ha sido Seat, que curiosamente pertenece a un grupo que ha sufrido mucho. La marca española, logra un aumento del 15,3%. Entre las marcas importantes, también ha salido bien parada Peugeot, con un incremento del 10,6%. Kia con un 7,8% queda delante de Citroen con un 6% que mejora por poco a Toyota con un 5,75%. Fuera de las marcas más importantes, cabe resaltar a Volvo con casi un 30% de subida, Mini con un aumento algo por encima del 25%, Jaguar por encima del 37% y DS que parece que nota el efecto del DS7, sube un poco más del 2%, al igual que Lexus.
Y a partir de ahí, el desastre. De más a menos ostión entre los fabricantes más representativos, comenzaremos por los batacazos con sabor italiano de Alfa Romeo que cae un 67% y Fiat que lo hace en un 62%. Audi se queda cerca del 60% también y luego siguen con cifras más modestas pero no por ellos menos contraídas, Land Rover con un 57%, Suzuki un 55%, las marcas de la Alianza Nissan y Renault con un 50,7 y 51,4% que acusan las automatriculaciones de agosto como ninguna otra grande, Honda y VW un 29%, seguida de su filial Skoda con un 26,6% de bajada, apenas peor que Smart. Mercedes por su parte cae poco más del 15%, Opel que sigue sin levantar cabeza un 12%, Mazda un 11,5%. Con caídas más suaves tenemos a Ford, con un 6,4%, Hyundai con un 5,8%, Dacia y Mitsubishi con poco más de un 3%, BMW con un 1,7% y casi sin moverse Jeep apenas cae medio punto.
Respecto a los canales, los particulares han supuesto algo más de la mitad de las ventas, seguidos de empresas y por último alquiladoras, que caen un 50% con el final del verano, aunque los otros también caen por encima del 10%.
Los coches de gasolina han ocupado el 61% de las ventas, llegando los eléctricos al 1.2%.
En cuanto a sectores, el único que ha aguantado bien el tipo ha sido el de los SUV pequeños, con un aumento del 31,6%, pero curiosamente las berlinas también hay tenido saldo positivo, con un aumento modesto eso sí, del 3,6%. Por contra los monovolumen grandes copan el primer puesto en números negativos con una caída del 56,5%, seguido del segmento D con un 47%.
Mes atípico, que sigue a otro mes raro y supongo que el mes que viene aún no veamos normalidad.