[davidgl]

Buenos dias a todos!

Como ya comenté brevemente en el hilo del Corsita, el otro dia tuve el placer de probar un Lotus Elise 220 Sport de un buen amigo mio. Fue un paseo corto pero intenso y aunque puede parecer exagerado, he necesitado algo de tiempo para reposar un poco el torrente de información y de sensaciones que recibí al subirme en ese maquinón durante un trayecto de poco mas de 15 minutos y a ritmo normal del trafico.No me quiero imaginar lo que se puede experimentar conduciendo, o más bien, pilotando este coche a un ritmo mas alegre. Espero en un futuro no muy lejano poder vivirlo.



He intentado relatarlo lo mejor que se, y espero que no se haga muy largo, pero no quería dejarme nada. Espero que os resulta ameno al menos.

El coche por fuera ya lo conocéis, es muy pequeñito, cortito, bajito, parece de juguete. Lo primero que sentí al subirme, es que hay que estar en forma. El método de introducirte en el coche, ya tiene cierta complejidad: una pierna, mano al pomo del freno de mano, dejas caer tu culo al asiento y ya solo falta la otra pierna, mierda, no soy tan flexible. Tras forzar un poco la flexibilidad de la rodilla, lo he logrado, ya estoy sentado.



Una vez ahí, ajusto la posición longitudinal del asiento y… ya, no hay mas ajustes posibles. Es una pena, ya que es la única pega que le encuentro a este coche, me explico: La posición de conducción es perfecta, muuuuy bajito, tumbado, las piernas semiestiradas, los brazos en su posición perfecta respecto al volante, pero.. hay un pero. Yo mido 1,85m y en mi caso particular, una vez que me he colocado como yo me siento cómodo, la pierna izquierda me queda muy cerca del volante, tanto, que en las curvas a izquierdas, mi mano llega a tocar/golpear la pierna al girarlo. Nota mental: En la próxima toma de contacto tengo que probar a sentarme un puntito más atrás a ver si así mejora la experiencia.

Bueno, tras acomodarme en los backets, me doy cuenta que no son tan cómodos como los Recaro CS de mi coche. En el Lotus, los asientos agarran muy bien, no dejan moverte ni un milímetro, pero sí es cierto, que el acolchado es fino y deja sentir en tu culo la estructura rígida del asiento. No es para nada una pega, sino una apreciación, una virtud, eso significa que son ligeros, y eso es lo que se busca en cada esquina de este coche.

Arranco el motor…. Que bramido, el 1.8 con compresor suena de maravilla. Nada más arrancarlo suena una estampida en tu nuca, un sonido bronco y grave, que te hace volver a darte cuenta, que esto es una cosa seria. Una vez en marcha el sonido del gorgoteo del escape al soltar el gas es adictivo. El empuje es sublime y el compresor se deja notar con un silbido que aumenta al ritmo de las rpm.

Vuelvo donde estaba, tras arrancar el motor, el siguiente paso es meter primera y marcharme de ahí como alma que lleva el diablo. No es tan fácil, ya que aunque el tacto de la palanca de cambios es maravilloso, muy mecánico, muy preciso, duro, no estoy acostumbrado a algo así. Ese tacto es perfecto para ir encendido en un tramo de curvas o en circuito, ya que es muy robusto y está hecho para eso, claro. El problema con el que yo me encontré, es que soy un zarpas, lo primero; y lo segundo es que los que venimos de coches “normales”, por muy deportivos que sean, no hemos tocado una cosa así en la vida, y no nos hacemos a la idea de lo diferente que es a cualquier otro que hayamos probado nunca. Además los movimientos trasversales de la palanca son ultra cortos, es decir, 1-3-5 están muy juntitas, al igual que 2-4-6. Que ocurrió? Que al ir a meter primera, no estaba seguro de si había metido 1 o 3 y claro, teniendo que arrancar en pendiente, quería estar seguro de no despeñar el coche antes siquiera de haberlo movido del sitio. Tras dos o tres mete-saca, me dije, oye, no puede ser tan difícil, ya estará… Y sí, ya estaba.



Por fin salgo de allí..1°, 2°, 3°, el embrague es duro y su recorrido cortito, pero me gusta mucho y me adapto rápido. Llega la curva, freno… el tacto es duro, muy dosificable, me gusta mucho. (Sobre el tacto de los pedales, me he dado realmente cuenta de lo duro que es sobre todo al volver a conducir mi coche. El mío esta hecho de blandiblu…) Voy a reducir a segunda… upsss, esto es 4… Otra vez, cenutrio??!! Vale, ahora sí, segunda.

Hago varios kilómetros más, un par de punta-tacón, muy sencillo de hacer con el lateral del pie. Las marchas ya entran cuando y donde yo quiero, nos entendemos.



En el trayecto, pasamos por varios pueblos, cruces, rotondas, etc… El Lotus demuestra en cada momento que el objetivo para el que fue construido era la ligereza, y gracias a ello sientes como el centro de gravedad es muy bajo, que no hay ningún movimiento de la carrocería en las curvas, que además la suspensión puede trabajar y tiene cierto recorrido sin ser seca en ningún momento. La dirección no está asistida y se hace notar. Tiene peso, mucho. No es ni mucho menos “resistida”, pero acostumbrado a coches “normales”, hay que trabajar para girar el volante. Además trasmite todo, cualquier piedrecilla que pisen los neumáticos, puedes notar donde se ha quedado pegada en los semislicks.

Hay una pequeña recta y el coche que me precede esta a varios cientos de metros…. Gas a fondo!! Mi cabeza ha golpeado con el asiento mientras estoy saliendo catapultado…mierda, voy en segunda a 5000 rpm y ya me estoy pasando algún que otro límite, tengo que soltar el gas, me queda la mejor zona del motor, para otro dia. Supuestamente tiene mas o menos la misma potencia que mi coche (10cv más), pero la aceleración no tiene nada que ver. El peso es la clave, es muy ligero y eso hace que todo mejore, comportamiento en curva, frenada, aceleración. Deberían obligar por ley a que los coches no pesaran mas de 1000kilos, que felices seríamos…



Este Lotus Elise es una máquina muy bien afinada, es un bisturí listo para entrar a quirófano. Lástima que hoy me haya quedado en la sala de espera.

PD: Lo de bajar del coche lo dejamos para otro dia, cuando encuentre mi dignidad.