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EXTERIOR.




El modelo es un 320i, de 2020 y con 29.600km. Tiene el acabado Sport, color blanco y las llantas de 17” de serie. Cuenta con los marcos de las ventanillas en negro lacado y los cristales oscurecidos.

No lleva muchos extras, pero luce mejor que el Mercedes-Benz Clase C W205 que tenía anteriormente, al menos bajo mi opinión,

El frontal es muy agresivo, con los faros rasgados, unos riñones de tamaño normal y un parachoques bastante limpio, mucho mejor que el del restyling, bajo mi opinión.

El lateral, es sencillo, con varias líneas de tensión que dinamizan el perfil del vehículo. Las llantas, de 17”, están ligeramente oscurecidas. Con 18” se vería mucho más llamativo, pero creo que la medida de serie visualmente le queda bien, no siendo excesivamente pequeñas. Los marcos de las ventanillas en negro piano y los cristales oscuros le dan un aspecto más dinámico.

La trasera es muy atractiva, con los faros tridimensionales le dan bastante personalidad. Tiene doble salida de escape (real) y los captadriopticos metidos de forma idéntica que los antinieblas en la parte delantera, dandole coherencia estética al conjunto.


INTERIOR.

Por dentro, nuevamente, encontramos un coche más o menos de serie, teniendo como extras, los asientos deportivos mixtos cuero/tela, asientos con calefacción, volante M con calefacción e iluminación ambiental.

En cuanto a calidad constructiva, es de lo mejor que hay en el segmento, bastante por encima del Mercedes-Benz Clase C actual y anterior, y al nivel de S60 y A4.

El salpicadero es bastante corto, es de plástico engomado, y molduras en negro piano. El ribete plateado es de plástico, pero de muy buen tacto. Los botones del clima son metálicos y son sólidos y tienen un tacto exquisito.

El volante, opcional M, tiene un aro muy grueso, a mi personalmente no me ha disgustado, pero si que se me hace raro, acostumbrado a aros más finos. Creo que no es para todo el mundo, pero no me ha parecido algo ni negativo ni positivo. Es completamente redondo y tiene un tacto y una calidad muy buena.

La consola central es de negro piano, con una palanca de cambios con un tacto agradable, aunque no se si por el calor, pero cuando metías la marcha atrás, crujía un poco la “base” de la palanca. A la derecha tenemos el iDrive y debajo de la palanca de cambios tenemos los modos de conducción y el freno de mano eléctrico.

El apoyabrazos es amplio y queda perfecto para conducir. Los asientos son magníficos, cómodos, firmes y con una gran sujeción lateral y banqueta extensible, que tras casi dos horas conduciendo, es de lo mejor que existe para los que tenemos las piernas largas, te ofrece un una sujeción de las piernas excelente.

La postura de conducción es de las que me gustan, se agradece montar en un coche en el que te puedes sentar muy bajo y con las piernas estiradas. Con la posición de conducción a mi gusto, es agradable poder ver el morro y tener más o menos el control de la parte delantera.

El espacio delante es excelente en todas las cotas, incluso en altura, supongo que será porque este modelo no tenía equipado el techo solar.

Detrás no he subido, pero con el asiento en mi posición de conducción, detrás quedaba poco espacio longitudinal. El maletero es correcto, con formas regulares y una boca de carga correcta.

El multimedia era el base, con la pantalla de 8,8” tiene un tamaño adecuado, pero acostumbrados a pantallas gigantes últimamente, es algo pequeña, aunque a nivel personal es más que suficiente.

Tiene una calidad excelente, tanto a nivel de definición como de funcionamiento, tiene una respuesta y una fluidez excelente.
Los menús son sencillos y es bastante intuitivo. Tiene CarPlay inalámbrico. El modelo también estaba equipado con un cargador inalámbrico con hueco para smartphones de tamaño grande, en mi caso, el 12 Pro Max, entra perfectamente.

La instrumentación, también de serie, es semi-digital, tiene también una visualización buena y ofrece la información básica y necesaria. Por gustar, me gusta más que la instrumentación digital opcional que puede equipar, sinceramente.

La llave es bonita, tiene peso y está bien acabada.


COMPORTAMIENTO DINÁMICO.

En este caso el modelo es un 320i, que cuenta con un motor de dos litros, cuatro cilindros, 184cv y un par de 300Nm. Acelera de 0-100 km/h en 7,1 segundos, y alcanza una velocidad máxima de 240 km/h. Está equipado con la caja de cambios automática de 8 velocidades de convertidor de par ZF.

Creo que para un uso normal, tiene una potencia más que suficiente para todo tipo de uso, incluso para pasártelo bien y circular sin problema a velocidades poco legales.

El motor tiene una respuesta impecable, responde rápido, entrega la potencia de forma muy lineal desde las 2200 rpm y acelera con mucha contundencia. En modo Sport, al acelerar a tope, coge velocidades muy por encima del limite legal, sin darte apenas cuenta. El coche, por autopista, a 150/160 km/h el coche ni se inmuta, el coche es tan sumamente aislado y filtra tan bien que sientes que vas a 120/130 km/h.

La caja de cambios ZF es bastante rápida, aunque si que es cierto que si vas con el coche “llaneando”, que se pone en séptima u octava y le pisas a fondo para acelerar, tarda unos segundos en bajar a tercera o cuarta, y entonces es cuando el coche empieza a acelerar en todo su esplendor.

En un funcionamiento normal, la transición entre los cambios de marchas es rapidísimo apenas es perceptible como sube y baja de marchas. Funciona de manera muy suave y es muy rápida.

La dirección es precisa, poco informativa (como todas las eléctricas), pero es muy directa y tiene bastante peso y un tacto tirando a duro. Entre el modo Confort y Sport no he notado grandes diferencias.

Tiene 3 modos de conducción, yo lo he llevado en Confort y Sport.

En Confort el coche es muy silencioso, el motor entrega la potencia de manera lineal y muy suave, la caja de cambios tiende a llevar marchas largas, por lo que si necesitas adelantar o algo en modo confort, tarda unos segundos en reaccionar y bajar las marchas necesarias para coger velocidad, pero una vez que lo hace, te mete la marcha que justo necesitas para que el coche acelere con contundencia.

En modo Sport en cambio, todo se vuelve mucho más reactivo, tanto el motor como la caja de cambios. En mi opinión, en carretera nacional es el modo de conducción ideal para realizar adelantamientos, puesto que la caja de cambios va mucho más rápido y en cuanto pisas el pedal del acelerador baja las marchas necesarias para la entrega de potencia. En este modo, la caja de cambios apenas tiene retardo y el motor se nota mas vivo y reactivo. También suena algo más, supongo que lo hará a través de los altavoces, porque en el modo Confort apenas es perceptible el sonido del motor.

El coche está muy bien aislado, es super silencioso.

El coche tiene una suspensión impecable, firme, pero bien filtrada, por lo que es cómodo en autopista, y en curvas dinámicamente va genial, es super estable y se traga las curvas como si nada, incluso entrando relativamente fuerte el coche ni se inmuta. El coche dinámicamente me parece mucho mejor que el Clase C de anterior generación que probé en 2019, se adapta mucho mejor a mi estilo de conducción.

Me ha gustado mucho el tacto general del coche, y aunque al principio se me ha hecho “enorme” a los 15 minutos, ya me sentía como uña y carne con el coche. Transmite mucha confianza, es muy cómodo y el tacto deportivo te incita a llevarlo en modo Sport, porque la capacidad de aceleración y la forma en la como toma cada curva, es impresionante.


CONCLUSIONES.

Me quedé en 2019 con las ganas de probarlo cuando se lanzó (tuve la oportunidad, pero era tarde). Pero realmente es un coche que me ha encantado, mucho más que en su momento el Clase C W203.

Estéticamente es muy bonito, aunque a mi me gusta más la silueta del Serie 4 GC, más deportivo y juvenil, y quizás éste tenga una puesta a punto más deportiva que el Serie 3, según lo que dijeron en la presentación del Serie 4 Coupe. No obstante, se ve moderno y actual y me parece de los BMW más atractivos actuales.

Por dentro, como todos los BMW, tiene una postura de conducción perfecta y todo está donde quieres que esté. Todo está ordenado y bien distribuido. La calidad constructiva es excelente, tanto en materiales como en ajustes.

Los asientos son muy buenos, son cómodos y recogen el cuerpo en las curvas de manera excelente.

Dinámicamente con este motor me parece más que suficiente, acelera de manera contundente y coge velocidad muy fácilmente. Es un coche muy ágil, con una calibración de la suspensión para mi gusto perfecta, filtrando muy bien las irregularidades del asfalto, pero a la vez, manteniendo el peso y las inercias a raya en zonas de curvas.

El consumo medio estaba en 7,6l/100km, siendo su hábitat natural la autopista a velocidades medias de 140-150km/h, por lo que me parece un registro aceptable para el uso del coche.

¿Me lo compraría? Si, sin duda, es agradable subir a una berlina y recordar lo bien que se va sentado muy cerca del suelo y con las piernas estiradas.

Estéticamente me parece más juvenil el Serie 4 GC o el Serie 2 Coupé si buscara algo de 3 puertas, ya que todos ellos comparten motor y plataforma e interior, por lo que me compraría el más barato, seguramente, el Serie 2.

Pero como berlina de segmento D, me parece una de las mejores opciones si quieres un producto divertido y que te apetezca conducir y bien construido por dentro. Sin duda me lo compraría antes que el Mercedes-Benz Clase C o el Audi A4.