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Si los ves circulando por la calle te da la sensación de que están a punto de partirse por la mitad, o que se les va a caer una puerta en cualquier momento, pero debajo de esa carrocería con aspecto desmejorado hay coches con una buena mecánica. Estamos hablando del Rat Style, una tendencia de tunning que parece revelarse contra los estándares de la belleza y que no para de generar controversias y discusiones entre los aficionados del mundo de la automoción.

Orígenes
Cuenta la leyenda que este movimiento nace en los Estados Unidos, y que surgió sin intenciones estéticas, sino como resultado de las difíciles condiciones económicas de gente que solo tenía dinero para el mantenimiento de la mecánica del coche. Eran tiempos complicados, había que priorizar, así que el dinero que invertían iba solo para mantener funcionando el motor; la carrocería y la pintura se quedaban tal cual estaban, y si algo se arreglaba era a mano propia.
Pero con el paso del tiempo, algunos le vieron su lado original a estos coches de mal aspecto. A partir de entonces fueron creciendo la cantidad de aficionados que han optado por esta clase de tunning, muy original y rompedor. En un mundo donde un coche solo es valorado cuando brilla, está limpio y pulido, ¿por qué no buscar algo un poco diferente?

Estética
No hay que confundirse, el Rat Style de hoy en día ya no tiene mucho que ver con las necesidades de sus precursores. Aunque no lo parezca, la gente llega a invertir enormes cantidades de dinero para conseguir una carrocería rat. Si están bien tratados, eso que parece óxido, pintura desgastada o grafitis hechos por una pandilla de vándalos ha sido pensado, diseñado y trabajado. Existen pinturas especiales, diseñadas específicamente para simular el óxido. Sin embargo, algunos se atreven a jugar con el óxido y la corrosión reales porque no aceptan “imitaciones”.

Por dentro también están destrozados, ¿qué esperaban? Tapizados desgarrados, basura en el suelo, salpicaderos partidos y rayados, guanteras que no cierran… todo es válido para esta forma de hacer arte. Las imágenes asombran tanto que algunos no pueden parar de preguntarse por qué alguien le haría semejantes barbaridades a su pobre coche.
Dentro de este estilo también hay quienes buscan adornar al vehículo con la mayor cantidad de accesorios retro o de época. Las bacas de equipajes, por ejemplo, son especialmente buscadas y valoradas ya que sobre ella colocan maletas, neveras, chapas, llantas, tanques de gasolina, retrovisores y otra infinidad de objetos que cuanto más oxidados y abollados estén, mejor.

Filosofía Rat
Muchos apasionados de este movimiento afirman que, más allá de que les guste la estética de los coches, encuentran una forma de expresión, una necesidad de luchar contra los estándares de la belleza impuestos por la sociedad y el mercado. El Rat Style busca lo bello a través de lo feo, molestar a los puristas de la estética e incomodar a aquellos fanáticos de mente cerrada. Para los que forman parte del mundo Rat, los coches no necesitan estar detallados, ni tener acabados perfectos, ni brillar como espejos para ser valorados.
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Personalmente, como en otras formas de personalizar un coche, ya sea Rat, stance, racing, o como quieran llamarlo. Algunos me "gustan", aunque la mayoría demasiado excesivos.  Y es que esa moda de llevar las cosas al extremo...no puede ser buena. 

Qué opináis vosotros del Rat style?