03-03-2017, 15:52
Pues hoy me he enterado de que un vecino, de 40 y pico, casado y padre de un chaval de la edad de los míos y otro más pequeño, amable, simpático, conocido por todo el barrio porque su mujer trabaja en un bar de la zona y él es repartidor por aquí, ha sido condenado a 18 años de prisión por abusar de dos disminuidas psíquicas de 15 y 16 años hace 2 años.
El caso es que yo no sé si ya no vive o no en su casa o qué porque hace tiempo que no coincido con él, pero la noticia no dice que haya entrado en prisión y cabe recurso, por lo que puede que siga viviendo aquí.
El caso es que sabiendo lo que sabemos, mi mujer me ha comentado que se lo digamos a mi hija (14 años), pero no sé si será lo mejor porque realmente no es fácil coincidir con él a solas salvo cuando viene del instituto si lo topa en el portal o la escalera y con frecuencia viene con su hermano (de la misma edad). Además, no tenemos ascensor, el portal es diáfano y acristalado a una calle transitada... vamos, que no veo peligro. Por otro lado hemos estado conviviendo tiempo sin ningún problema. Y si la advertimos ella cuando lo vea tal vez pase mal rato, o incluso si se cruza con él en la escalera no sabrá si dar la vuelta o qué hacer y la generará un momento de tensión que seguro será innecesario. aparte que si recurre y le dan la razón pues vaya papelón.
También pienso en la familia. Obviamente, no voy a mencionarles el tema, seguiré actuando con cordialidad, mis típicas bromas cuando me la encuentro, el saludo a los chavales y listo. Imagino que ya será suficientemente duro para ellos pasar por algo así para que encima noten que la gente ha cambiado con ellos, bien como reprobación (injusta) o como objetos de la compasión o la lástima ajena. De todas formas, imagino que lo normal es que ella se separe de él tras este asunto. Encima siendo una familia modesta, quedarse sin un sueldo y encima teniendo que indemnizar a las víctimas, tienen que quedar en una situación jodida.
En fin, que son de esas cosas que lees y te parecen lejanas y de repente, pues te caen al lado y no sabes cómo reaccionar.
El caso es que yo no sé si ya no vive o no en su casa o qué porque hace tiempo que no coincido con él, pero la noticia no dice que haya entrado en prisión y cabe recurso, por lo que puede que siga viviendo aquí.
El caso es que sabiendo lo que sabemos, mi mujer me ha comentado que se lo digamos a mi hija (14 años), pero no sé si será lo mejor porque realmente no es fácil coincidir con él a solas salvo cuando viene del instituto si lo topa en el portal o la escalera y con frecuencia viene con su hermano (de la misma edad). Además, no tenemos ascensor, el portal es diáfano y acristalado a una calle transitada... vamos, que no veo peligro. Por otro lado hemos estado conviviendo tiempo sin ningún problema. Y si la advertimos ella cuando lo vea tal vez pase mal rato, o incluso si se cruza con él en la escalera no sabrá si dar la vuelta o qué hacer y la generará un momento de tensión que seguro será innecesario. aparte que si recurre y le dan la razón pues vaya papelón.
También pienso en la familia. Obviamente, no voy a mencionarles el tema, seguiré actuando con cordialidad, mis típicas bromas cuando me la encuentro, el saludo a los chavales y listo. Imagino que ya será suficientemente duro para ellos pasar por algo así para que encima noten que la gente ha cambiado con ellos, bien como reprobación (injusta) o como objetos de la compasión o la lástima ajena. De todas formas, imagino que lo normal es que ella se separe de él tras este asunto. Encima siendo una familia modesta, quedarse sin un sueldo y encima teniendo que indemnizar a las víctimas, tienen que quedar en una situación jodida.
En fin, que son de esas cosas que lees y te parecen lejanas y de repente, pues te caen al lado y no sabes cómo reaccionar.
- Lo único que necesitas para freír un huevo es, un Universo -