[König]

Tatra produjo entre 1980 y 1991 el T613 Special para ser utilizado exclusivamente por el presidente, los ministros, los diplomáticos y los más altos cargos militares del gobierno Checoslovaco. Se trataba de una versión alargada del T613 y tenía un interior y diseño frontal diferenciados (se le añadieron los faros delanteros y los espejos retrovisores del Mercedes W116). 
Tras la caída del comunismo, debido a las connotaciones políticas que tenían estos coches, muchos miembros del gobierno se negaron a utilizarlos (como fue el caso del presidente Václav Havel, que optó por un BMW 735iL).







El interior, aunque tenía un salpicadero de diseño distinto, no era mucho más lujoso que el de un 613 normal.


La guantera estaba diseñada para albergar un subfusil Skorpion, y debajo de esta tenía otro compartimento con la emisora y el inhibidor de frecuencia:




También se construyeron 5 unidades con carrocería landaulet destinadas a desfiles. Son los únicos coches automáticos que hizo la marca en toda su historia.