05-06-2019, 23:41
(05-06-2019, 20:05)pptrrx escribió: Pues en casa teníamos cinco, pero Amelie y Billie (madre e hija) murieron atropelladas, y Micha, la gata de mi abuela, falleció de vieja.
Amelie
Amelie era la gata más adorable que se pudiese tener. Muy sociable, mi madre y mi hermana se fijaron en ella (y sus hermanitos) en el escaparate de una tienda de animales de un centro comercial. Entraron a comprar algo, y mi hermana se acercó a ellos a acariciarlos. La tendera les dijo que los gatitos habían aparecido en el parking del centro comercial, que si querían uno. Y a regañadientes de mi padre, se la trajeron.
Muy cariñosa, dócil y gorda, su pelo me daba alergia (tengo una leve alergia a los gatos, y según el tipo de pelo se me acentúa más o menos). Curiosamente, también me pasaba con su bebé, Billie, y con el padre de la criatura, Ringo, que aún vive con nosotros.
Amelie y Ringo
De la pareja nació Billie, como digo. De enana tenía los ojos muy muy azules, y el pelo totalmente negro y sedoso. Perdió el color de los ojos al madurar.
De Micha no tengo fotos, creo. La típica gata negra, bastante asocial y nerviosa (fue adoptada de la calle).
De los que estaban y quedan, Ringo y Mushu.
Ringo es un gato negro y blanco, precioso, que se encontró mi hermana de cachorro dando un paseo en bici y se lo trajo a casa de risas. Es un gato, digamos, peculiar. No sabe maullar (emite ruidos, sí, pero muy raros), es despistado, pasota, y le pierde la comida. Come absolutamente de todo, y da más la vara que un perro. Te roba la comida si te descuidas, ¡hasta se la roba a mi mastina!
No, no quería mimos, sino mi cena.
Mushu es mi favorito, el rubio. Es majete y sociable, aunque bastante independiente. Echa muchísimo de menos a mi hermana (que ahora vive en Inglaterra), y hay temporadas en las que demanda muchos mimos. Normalmente lo ves dormir encima del ordenador desde el que mis padres hacen Skype con mi hermana.
De vez en cuando reclama mimos, pero es imposible. Tengo una perra, que es muy celosa, y vive en mi habitación. No deja a los gatos pasar a mi habitación, ni los deja acercarse a mí si estoy en el salón o en la cocina. Salvo...
...al demonio hecho gato. Cuando mi hermana estuvo una época viviendo sola, adoptó a la hija gatuna de satán, Leia. No os dejéis engañar por las fotos, es mala, mala a rabiar. Te araña, muerde, bufa... pasa del amor al ataque en un segundo, es impredecible. También echa de menos bastante a mi hermana y eso la está volviendo algo más dócil.
No se creerá ella Darth Vader
Pedazo de post. Muy currado. Amelie era preciosa. DEP.